El corazón está protegido por una membrana llamada pericardio. La pericarditis aguda es una inflamación de este pericardio.
Lo mismo te suena un poco más si te digo que Carvajal, el defensa del Real Madrid estuvo de baja en noviembre de 2017 por este motivo.
Y ahí lo tienes, que sigue jugando al fútbol y va convocado con la selección española.
¿Pero por qué se produce la pericarditis aguda? ¿Qué síntomas da?
¿Con qué pruebas se puede diagnosticar? ¿Cuál es el tratamiento que tiene?
¿Es grave? ¿Se puede complicar?
Pues vamos con este artículo sobre el apasionante mundo del pericardio.
Lo primero ¿Qué es el pericardio?
El corazón es una víscera móvil, ponte la mano en el pecho y lo notarás. Para evitar que se roce con el resto de elementos que hay en la caja torácica va envuelto en líquido. Este compartimento líquido evita la fricción y lo protege.
Esto pasa en otras zonas móviles del cuerpo, por ejemplo las articulaciones, como en las rodillas o los codos. También los pulmones van envueltos en líquido para expandirse y protegerse de los roces.
Como lo envuelve por fuera, como sucede en las ciudades con la periferia, pues se le llama pericardio. Hay que imaginarlo como una telilla de escasos milímetros que va pegada al corazón como una pegatina.
En su interior lleva un líquido que hace las veces de lubricante, como el aceite del motor del coche. Este lubricante o líquido pericárdico se va renovando continuamente y se mantiene constante en cantidad.
Por último, se puede vivir sin pericardio. De hecho hay personas que nacen sin él.
¿Qué es una pericarditis aguda? ¿Por qué sucede?
Esta membrana puede inflamarse como respuesta a alguna agresión. Se le pone apellido de «aguda» si los síntomas han empezado recientemente. Si no llega a curarse en unas semanas que es lo habitual, se le llama «crónica».
Por ejemplo, tras una cirugía de corazón o un infarto. También porque cojamos alguna infección, por un virus u otro microorganismo y este dañe el pericardio.
Si se irrita por determinados fármacos o quimioterápicos. O porque se acumulan materiales de desecho en la sangre, como ocurre en la insuficiencia renal.
Las enfermedades de las articulaciones como el lupus, la artritis reumatoide o la esclerodermia también pueden hacer que se inflame la membrana pericárdica.
Los tumores pueden también pasar a la sangre y sembrarse en el pericardio inflamándolo.
Por último, puede ser que la causa sea desconocida, entonces no podemos saber el origen.
Síntomas de la pericarditis aguda
Al inflamarse se hace más grueso y aumenta la fricción. Esto se transmite a los nervios viscerales y de ahí al cerebro. Lo que vamos a notar es un dolor intenso en el pecho, hacia el cuello y hacia la espalda que se alivia cuando nos echamos hacia delante.
Al ser un dolor inflamatorio puede durar días si no hay tratamiento. Además suele ser fijo, mantenido y muy limitante. No se desencadena, ni tiene que incrementarse, por esfuerzos o emociones, como ocurre con la angina de pecho.
Puede ser que al coger aire hondo moleste más. Además si es por una infección, que es lo más frecuente puede puede que los días previos hayamos tenido fiebre, dolor de garganta, tos, etcétera.
¿Cómo se diagnostica?
Pues lo primero es que los síntomas sean parecidos a los anteriores. Si ha habido una infección como un catarro o una gastroenteritis la semana anterior y aparece un dolor de este tipo es muy orientativo de una pericarditis aguda.
Además como las membranas están gruesas el corazón al latir hace un ruido característico. Hay que escucharlo con el fonendoscopio, como cuando intentamos oír los soplos. Se le llama roce pericárdico.
Pero lo que lo va a confirmar es que tengamos en el electrocardiograma alteraciones típicas de la pericarditis. Como apoyo en la analítica de sangre podemos tener otros datos.
También podemos usar el ecocardiograma para ver si hay acúmulo de líquido en el pericardio. A eso se le llama derrame pericárdico.
¿Cuál es el tratamiento?
Se basa en dos pilares, reposo y anti inflamatorios. Tan importante es tomarse las pastillas durante el tiempo suficiente como hacer reposo. Esto suelen ser unas 4 semanas y es fundamental para evitar recurrencias.
Muchas veces la pericarditis aguda no es más que la expresión de otra enfermedad, que habrá que diagnosticar y tratar a parte. Pero en la mayoría de las ocasiones bastará con tratar el dolor con paracetamol, la inflamación con anti inflamatorios y respetar el reposo.
En algunos casos puede complicarse acumulándose gran cantidad de líquido. Esto pasa porque el pericardio produce más líquido del que es capaz de absorber, porque enferma. Si el líquido presiona al corazón hay que pincharlo y extraerlo.
En situaciones de muchas recurrencias de pericarditis y de derrames puede hacer falta operar para quitar el pericardio. Muerto el perro se acabó la rabia. Pero esto es infrecuente en una primera pericarditis.
¿Es grave? ¿Se puede complicar?
Como hemos visto puede haber complicaciones. La peor, que se acumule mucho líquido y haya que pincharlo. Y en el peor de los casos que haya recurrencias que obliguen a operar.
Pero la mayoría de las veces la pericarditis aguda es un proceso de unas pocas semanas. Leve y que se resuelve por completo sin dejar secuelas.
Para garantizar esto es fundamental cumplir el tratamiento y el reposo. A largo plazo la colchicina, que es un anti inflamatorio también se manda durante 3 meses para evitar recaídas. Si hay una recaída se prescribe durante 6 meses.
Como hemos dicho la pericarditis o el líquido en el pericardio pueden ser más o menos graves dependiendo de que haya detrás. Es decir, dependerá de qué enfermedad haya sido la causa.
Por ejemplo, si es un lupus pues habrá que controlar la respuesta inmune para que no haya recaídas. Si es un tumor habrá que hacer tratamiento oncológico.
En estos casos la pericarditis o el hallazgo de líquido no van a ser lo importante. Lo importante va a ser la enfermedad que hay de base, el tumor o el lupus en el ejemplo de antes.
Concluyendo…
La pericarditis aguda es una inflamación del pericardio.
Generalmente es una enfermedad benigna que cura con reposo y calmantes.
Puede haber complicaciones, la más importante el derrame. Si hay mucho líquido habrá que evacuarlo.
La pericarditis en sí no es lo importante. Hay que investigar qué proceso de base es el que ha irritado el pericardio.
Ante una pericarditis aguda, tranquilidad, reposo, anti inflamatorios y paciencia.
La ciencia moderna aún no ha producido un medicamento tranquilizador tan eficaz como lo son unas pocas palabras bondadosas
Sigmund Freud
10 comentarios
Por segunda vez he tenido el pasado mes derrame pericárdico. La semana anterior me había mandado el médico antiinflamatorios que me vinieron muy bien. Ahora estoy en estudio del pulmón y no se sabe si tendrá relación.
Pero esta información tan clara nunca me la habían dado. Muchas gracias por este completo informe.
Hola de nuevo Elisa. Aquí no profundizo mucho en las causas ya que me centro en la forma más frecuente que en 9 de 10 es una pericarditis aguda de curso benigno.
El mensaje clave en esta patología es el siguiente: no es tanto «el qué» sino más bien «el porqué» de la pericarditis aguda. Lo más importante es saber por qué se ha producido y muchas veces es complicado dar respuesta a esta pregunta. Sobre todo si hay recurrencias de derrame hay que indagar en la causa.
Espero que te mejores. Un saludo
Nos está haciendo mucho bién a sus seguidores con tantas explicaciones, que aunque técnicas, nos las presenta de forma perfectamente asequibles, y siempre con un punto de humor por lo que se entienden muy bién. Es una gran labor divulgadora la que realiza de forma altruista, y por ello le tenemos que mostrar nuestro agradecimiento.
Gracias Ramón, esperemos seguir así.
Y que vosotros lo leáis.
En las revisiones periodicas con el cardiologo y después de una eco me han diagnosticado válvula bicuspide y por lo visto es congentito.Tuve una fibriilacion auricular hace algunos año y de vez en cuando tengo alteraciones en los lastidos . Me recomendaron hacer algunos ejercicios para estimulación del nervio vago.Podria ser todo de la válvula bicuspide? Gracias
No tiene por qué. Todo dependerá de «lo mal que funcione» esa válvula bicúspide, que como te habrán explicado es de nacimiento y tiende a estropearse más velozmente que una válvula normal. Pero la fibrilación auricular y otras arritmias pueden ser independientes de que haya una alteración estructural en el corazón.
El ejercicio físico viene bien para las dos cosas.
Continúa tus revisiones y confía en tu cardiólogo. Un saludo
Muchísimas gracias Pablo por todas estas aclaraciones y esplicaciones a ciertos problemas Cardíacos o de otra índole parecida que podemos tener o padecer , algunas como en este caso nos sirve para intentar solucionarlo lo mejor posible o acudir a urgencias con ideas concretas de lo que nos pasa.
Te admiro por tu profesionalidad y por tu humanidad.
Un saludo.
Muchas gracias por tus palabras Miguel.
Seguiré aportando mientras sirva.
Impecable. Soy argentino. Actualmente hospitalizado por una recaída por pericarditis. La primera vez me dio hace un mes. Y hace 1 semana me dio una recaída por hacer un esfuerzo por el trabajo 🙁
En fin, leí el artículo completo y me. Encantó la explicación. Estoy tomando COLCHICINA y espero en unas semanas más estar 10 puntos. Saludos
Gracias Mauricio. Te deseo una pronta recuperación total. Ya sabes, reposo y cumplir medicación, la base de una buena sanación. Enfermedad que a veces es un poco pegajosa y costosa de superar totalmente, pero que casi siempre tiene un curso favorable.